Teniendo en cuenta cómo están las cosas, ahorrar se ha convertido en un objetivo importante para la gran mayoría de los hogares. Con tal fin, el autoconsumo fotovoltaico es una alternativa ciertamente interesante.
En este artículo te contamos en qué consiste y por qué puede ser una elección más que acertada para tu casa.
¿Qué es el autoconsumo fotovoltaico?
Básicamente, permite que tu familia o empresa se convierta en autosuficiente para generar la energía que consume.
¿Qué te parecería producir en tu casa la electricidad que vais a usar? Esa es la esencia, y para ello solo necesitas invertir en una instalación fotovoltaica para autoconsumo.
La energía solar es gratis y, en nuestro país, abundante y muy aprovechable. Se presenta como una energía limpia, sencilla de obtener y muy fácil de utilizar. De hecho, basta con colocar en el tejado del inmueble placas fotovoltaicas de autoconsumo para acceder a ella.
De este modo, podrás ahorrar en calefacción y ganarás independencia frente a las grandes compañías eléctricas, ya que podrás obtener tu propia energía.
¿Cómo funciona?
La electricidad fotovoltaica de autoconsumo se obtiene a partir de una instalación que incluye paneles fotovoltaicos y un inversor solar.
Este es el punto de partida y, quizás, el único hándicap de este enfoque: tienes que invertir por anticipado.
Los paneles captan la luz del sol y la convierten en energía, mientras que el inversor la transforma en energía eléctrica alterna (inicialmente es continua), aprovechable para alimentar tu red y a los distintos electrodomésticos existentes.
En ningún caso debes preocuparte por la posibilidad de cortes en el suministro. El sistema prevé que, si no generas la energía necesaria, recibas el resto del modo convencional, es decir, directamente de la red eléctrica general.
Ambos procedimientos son, por ello, complementarios, si bien siempre se prima el de autoconsumo.
Otra consideración importante es que puedes sacar rentabilidad por tus excedentes de electricidad autogenerada.
¿Es rentable el autoconsumo fotovoltaico?
La respuesta es indudable: sí.
La única cuestión analizable es cuánto tiempo vas a tardar en amortizar tu inversión inicial. Depende de factores diversos, pero sobre todo de las características del inmueble, del tipo de instalación fotovoltaica realizada y de la abundancia solar en la zona.
El enclave geográfico y los hábitos de consumo son, desde luego, los condicionantes principales para este cálculo.
En todo caso, el mecanismo económico está claro: adelantas un dinero para incorporar a tu vivienda una instalación avanzada, más o menos costosa según las circunstancias.
Como contrapartida, vas a ahorrar bastante dinero mensualmente en tus facturas energéticas. En equis años, una cifra que depende de los dos indicadores anteriores, habrás amortizado y recuperado la inversión. A partir de ese momento, estarás ganando dinero cada mes.
Considera, por otra parte, que existen distintos tipos de autoconsumo fotovoltaico: conviven, sobre todo, las instalaciones y placas fotovoltaicas de autoconsumo aisladas y las conectadas a la red.
Las primeras son las más autosuficientes y han de incluir baterías capaces de almacenar los sobrantes.
¿Cuánto cuesta instalar en casa?
No es posible concretar a priori el coste real de una instalación fotovoltaica en un inmueble de forma general.
Cada caso requiere un análisis específico y minucioso para calcular dicho coste.
Estaríamos hablando de una horquilla entre 2.000 y 10.000 euros, si bien hay veces en que la cantidad se cifra en 1000 euros y otras puede alcanzar hasta los 16.000.
Como promedio en el uso residencial, la referencia que puedes tomar es de unos 5.000 o 6.000 euros.
La parte positiva, aunque también está determinada por las circunstancias, es que el ahorro en las facturas eléctricas suele situarse entre el 50 % y el 70 %. Teniendo en cuenta, además, que la energía no cesa de encarecerse, el importe mensual que vas a ahorrarte en este abono recurrente es realmente significativo.
Así, a bote pronto, mira tu última factura eléctrica y fíjate en cuánto pagaste. Calcula el 60 % de esa cantidad. Divide 5500 euros entre el número obtenido y, de manera orientativa, sabrás en cuántos meses habrías cubierto la inversión realizada. ¿Te seduce la idea?
En definitiva, ¿qué debo hacer?
Esta es una decisión que cada familia o empresa ha de tomar por sí misma. Lo cierto es que, económicamente, es una medida rentable que te favorecerá en el futuro. Además, estarás contribuyendo a hacer el planeta más sostenible.
Pero, claro, cada cual conocemos nuestras circunstancias. Te sugerimos hacer números, contactar con especialistas cualificados que puedan estudiar tu caso concreto sin compromiso y, tras ese análisis, barajar la opción y establecer si te conviene o no aplicarla.
El autoconsumo fotovoltaico es, hoy en día, una alternativa real que puede beneficiar a tu familia y, como acabamos de decir, también al medioambiente. No descartes esta posibilidad sin haber sopesado sus pros y sus contras en tu situación.
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