Atención, pregunta: ¿qué cubre el seguro del hogar? No, no estamos en un concurso de televisión. Pero conocer o no esta respuesta te hará ganar —o dejar de perder— dinero cuando contrates un seguro.
Estamos de acuerdo. Tenemos tantas obligaciones y exigencias que la vida no nos da para según qué cosas.
Si quieres saber qué entra en tu seguro de hogar, es mucha movida… Entre que encuentras la documentación, la lees, entiendes lo que pone… Buf, demasiado pesado. Te entendemos. Nos pasa a todos.
Por eso, hemos decidido echarte un cable. A continuación te resumimos qué tipo de coberturas se incluyen en un seguro de hogar. En el tuyo, también.
5 ejemplos para entender qué cubre el seguro de hogar
Seguramente, vas a descubrir cosas que ni te imaginabas. ¿Lo principal? En caso de incidencias de este tipo, tu seguro cubrirá los costes. Así que ese dinerito, te lo ahorras.
Mira estos ejemplos:
- Tu ducha filtra el agua al piso de abajo porque la tubería está rota. No solo causa goteras, también inunda medio piso ajeno y genera un montón de desperfectos. Esta clase de cobertura se llama responsabilidad civil.
- El techo de tu casita en la montaña se ha hundido. Llevabas demasiado tiempo sin mantenerlo bien y las últimas nevadas han supuesto un peso excesivo. Tu seguro cubre el continente de tu vivienda. Menos mal… ¿Quieres diferenciar mejor qué es el continente y el contenido?
- En el caso anterior, el techo ha caído directamente sobre tu televisor recién comprado. Ahora es una televisión plana, además, de arriba a abajo. El contenido también está protegido, aunque los objetos de mayor valor requieren pólizas especiales.
- Una regleta de enchufes sin certificado europeo ha petado y provocado un incendio en tu salón. Se han chamuscado las paredes, las cortinas y el sillón de lectura. Tu seguro te pagará por ellos.
- Se te han roto un par de persianas. Ni suben ni bajan. Si no tienes tiempo para comprobar las coberturas de tu seguro, imagínate para arreglar esa avería. Probablemente, tu seguro de hogar contará con un servicio de manitas sin coste. Llama para que te envíen a un especialista.
Qué tener en cuenta para elegir el mejor seguro de hogar
Los ejemplos del apartado anterior te orientan sobre cómo elegir el seguro de hogar. Evidentemente, debes adecuar lo que contratas a tus necesidades.
¿De qué te sirve poder reemplazar gratis una chimenea al completo, en caso de derrumbe, si vives en un piso y te calientas con radiadores de calor azul?
Es decir, debes contemplar cuáles son las coberturas de tu seguro. Además de las básicas, considera también las opcionales.
Coberturas
Existen dos tipos de coberturas dentro del seguro de hogar: las imprescindibles y las extraordinarias.
Son irrenunciables las siguientes:
- Responsabilidad civil: Indemnizaciones y costes de los daños ocasionados por nuestro inmueble a otras personas.
- Contenido: Daños a los elementos que tienes en casa: electrodomésticos, muebles, ropa, alimentos… Implica la reposición o el arreglo. Ojo, las joyas y otros objetos similares tienen costes extra.
- Continente: La casa en sí: todo aquello que la conforma. Desde los suelos o las paredes a las ventanas o las tuberías. No se suelen atender las negligencias ni las tareas lógicas de mantenimiento.
- Incendio y explosiones: Incluso los daños causados por el humo, si la cosa no ha ido a mayores, están contemplados.
- Robo: ¿Los amigos de lo ajeno —y enemigos de todo lo demás— han entrado en tu casa? Serás indemnizado por los daños y las pérdidas sufridas. Eso sí, todo dependerá de la valoración previa de esos objetos.
Entre las posibles coberturas extra figuran:
- Pérdidas en alimentos por fallos en el frigo.
- Daños en electrodomésticos por subidas de tensión.
- Daños estéticos tras una reparación.
- Uso de tu tarjeta de crédito fraudulento si te la han robado.
- Vehículos estacionados en el garaje.
- El ya mencionado manitas: desplazamiento y mano de obra.
- Responsabilidad civil… por las trastadas de tus hijos.
Precio
¿A que te parece un factor importante para elegir tu seguro de hogar? Lo es. Pero debes contemplarlo, sobre todo, en términos de valor, más que de gasto.
El coste del seguro depende de estos factores:
- Capitales asegurados. Cuantas más cosas, y más valiosas, incluyas, mayor será la prima.
- Tipo y año de construcción de la vivienda.
- Localización (código postal).
- Uso de la vivienda.
- Si está habitada o no. En alquiler o por sus propietarios.
- Reformas previas realizadas. Cuanto más recientes sean en aspectos como la electricidad o las tuberías, menos coste.
- Coberturas adicionales.
- Carencias y exclusiones. Ten este aspecto en cuenta. Determina cuándo empieza a cubrir un seguro de hogar. Y qué elementos quedan fuera de su protección.
Método de contratación
Fundamentalmente, puedes contratar un seguro de hogar, 100% online.
Es la manera más fácil y rápida de hacerte con la protección que realmente necesita tu hogar, y sin tener que pasar por procesos aburridos y complejos.
¿Tienes ya claro más qué cubre el seguro del hogar y cómo debes elegirlo? ¡Enhorabuena! Hale, puedes seguir con tus cosas. Echar una partida de Candy Crush, ver tu serie favorita en Netflix o, simplemente, fantasear con salir a hacer deporte mientras te tomas una cervecita.
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