¿Cada cuánto tiempo debes revisar los neumáticos de tu coche?

Tener el coche en óptimas condiciones es lo que te va a permitir hacer un viaje cómodo, seguro y sin contratiempos. Y esta puesta a punto tiene que pasar, sí o sí, por comprobar que la presión de los neumáticos sea la adecuada.

¿Alguna vez te has preguntado cómo revisar la presión de los neumáticos? ¿O cómo darse cuenta de cuándo o cómo tienen que inflarse? En este artículo, además de responder a estas preguntas, te contamos todo lo que tienes que saber para que te puedas asegurar de la buena salud de tus neumáticos.

La importancia de los neumáticos

Antes de hablar sobre cada cuánto tiempo es necesario revisar la presión los neumáticos de tu coche, es importante hacer hincapié sobre su función.

Piensa que los neumáticos van a determinar la eficacia y seguridad del coche. Y todo porque su labor en el vehículo es muy importante.

Soportan el peso: los neumáticos son la base del coche. Y deben, por lo tanto, resistir altas transferencias de carga, tanto en la aceleración como en el frenado.
Absorben irregularidades: los neumáticos aportan comodidad al conductor porque tienen la capacidad de amortiguar las desigualdades de la calzada.
Frenado del coche: los neumáticos, debido a su capacidad de agarre, facilitan un frenado eficiente, por lo que aportan seguridad a los ocupantes del vehículo.
Dar dirección: los neumáticos facilitan la conducción, de manera que determinan su estabilidad durante la trayectoria.
Influyen de forma directa en el consumo de combustible: como vimos en el post sobre cómo ahorrar combustible, el estado del neumático está directamente involucrado en esta cuestión.

La frecuencia con la que has de revisar la presión de los neumáticos

¿Tienes pensado coger el coche pronto? Pues venga, que toca ponerse manos a la obra para revisar la presión de los neumáticos. No te preocupes, porque no es tan difícil como puedas pensar, ya verás.

Lo primero es saber cuándo toca inflar los neumáticos. Y para ello, has de tener en cuenta lo siguiente:

- Muchos coches en la actualidad tienen un sensor de presión de neumáticos que indica un pinchazo o un neumático con poco aire. Si hay algún problema con su inflado, el testigo de la presión de los neumáticos se encenderá para avisarte.
- Si quieres saber qué presión llevan los neumáticos de tu coche, piensa que cada modelo tiene una ideal, que es la que recomiendan los fabricantes en función de distintas condiciones: número de pasajeros, velocidad, equipaje.
- Es posible ir perdiendo la presión recomendada de los neumáticos. Esto, además de por causas físicas naturales, también por deterioro de la válvula, llanta, roces, etc…
- Una presión baja acelera el desgaste del neumático, aumenta la resistencia a la rodadura y, por tanto, contribuye al aumento del consumo.
- Un neumático con un inflado superior al indicado por el fabricante disminuye la superficie de contacto de la goma con el asfalto y, por tanto, la adherencia, además de provocar un desgaste anómalo.

Como te dijimos antes, una presión adecuada de los neumáticos es fundamental para optimizar tanto su funcionamiento como el del vehículo en general.

Y por ello, hay que revisar la presión los neumáticos una vez al mes y cada vez que vayas a salir de viaje. Es la mejor manera de detectar falta de presión en los neumáticos y minimizar el riesgo que conlleva.

Así es cómo sabrás si necesitas comprobar la presión de los neumáticos

Es imposible evitarlo. Ya sea por el uso en sí o por desgastes anómalos, los neumáticos siempre tienden a sufrir deterioro debido a su uso.

Hay veces que la que lo notarás mientras conduces. Y otras que te avisará el testigo de la presión de los neumáticos. Pero también es importante abrir bien los ojos, porque hay ocasiones en las que se puede identificar de manera visual.

Apariencia visual. ¿Hay un neumático más aplanado que los demás?
Desgaste irregular en la banda de rodadura, especialmente en los bordes.
Cuando al conducir sientas menos precisión en la dirección o vibraciones inusuales.
Al sentir una inclinación excesiva del vehículo cuanto tomes las curvas.
Aumento en la distancia de frenado.

Para comprobar la presión, siempre en frío

Lo suyo es comprobar la presión de los neumáticos cuando están en frío (aunque de todos modos es muy importante que prepares tu coche para el frío, al igual que cuando conduces bajo temperatura elevada).

Piensa que cuando un neumático se calienta debido a la conducción, el aire en su interior se expande y aumenta la presión. Es decir, que el resultado que obtendrías no sería real.

Estaciona el vehículo en un lugar seguro, acuérdate de echar el freno de mano, de apagar el motor y de asegurarte de que los neumáticos estén en reposo.

¿Cómo saber la presión de los neumáticos?

Para saber qué presión llevan los neumáticos revisa el manual del vehículo o busca esta información en una etiqueta que hay dentro de la puerta del conductor.
Estaciona en un lugar seguro.
Quita la tapa protectora de la válvula del neumático.
Inserta la boquilla del medidor en la válvula del neumático y presiona firmemente hasta que no haya fugas de aire.
Lee la presión indicada en el medidor y compárala con la presión recomendada de los neumáticos en el manual del vehículo.
Ajusta la presión si es necesario.
Vuelve a colocar la tapa de la válvula del neumático.
Repite para los demás neumáticos, incluida la rueda de repuesto.

Por último, recuerda que tener a punto los neumáticos no solo te beneficia a ti y a tu coche, también al medio ambiente. Según datos de Bridgestone, el 81% de los conductores de la UE circula con la presión de los neumáticos baja, lo cual supone un impacto negativo en la salud del planeta.

¿Sabías que este hábito supone un gasto extra de 4.000 millones de litros de combustible y la emisión de 9,3 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera?

Otro motivo más por el que desde Zurich Klinc, te recomendamos que revises la presión de los neumáticos una vez al mes. Al fin y al cabo, se trata de una revisión sencilla, pero con grandes beneficios en cuanto a comodidad y seguridad.